Por José Luis Arredondo.
La noche del 27 de mayo de 1991, Jeffrey Dahmer -«el caníbal de Milwaukee»- cometió uno de sus horrendos crímenes. Unos minutos antes de que el hecho se consumara, la joven víctima alcanzó a alertar a dos desvencijados policías, pero éstos no fueron capaces de evitar el homicidio. Esta escena está en el centro de esta obra teatral, escrita por el guionista de «House of Cards» e interpretada por Willy Semler y César Sepúlveda.
Los escabrosos asesinatos cometidos por Dahmer han dado pie, entre varios registros audiovisuales, a la miniserie «Dahmer-Monster: The Jeffrey Dahmer History» y la docuserie «Conversaciones con asesinos: Las cintas de Jeffrey Dahmer», ambas disponibles en Netflix. Y también sirvieron de inspiración al dramaturgo norteamericano Keith Huff, autor, entre otros, de guiones de la serie «House of Cards», «Mad Men» y «American Crime», para escribir la obra teatral «Lluvia constante», que nos sumerge en la vida de la pareja de maltratados policías que no creyó el relato del joven Konerak esa fatal noche y, sin tener conciencia del fatal error y negligencia que cometían, lo entregaron a su asesino.

Denny (Willy Semler) y Joey (César Sepulveda) se conocen de toda la vida, ya que se criaron juntos en un barrio de Chicago. Denny es un tanto mayor que Joey, está casado con Connie y tiene dos hijos que son su razón de luchar y vivir. Joey está soltero pero en secreto ama a la mujer de su amigo y compañero.
Ambos policías han visto frustradas sus posibilidades de ascenso a detectives y patrullan las oscuras y violentas noches de Chicago empapados por una lluvia que no cesa. Cada noche, deben hacer frente a lo más podrido de una gran ciudad en medio de drogas, prostitución, corrupción, feroces asesinatos, violencia racial y cuanto delito se nos pueda venir a la mente.
Denny y Joey habitan un infierno urbano que la mayoría vemos solo en películas, series y los noticiarios de nuestra TV local, con su crónica roja que inunda la pantalla cada jornada. Es en esos callejones lóbregos y malolientes en que se jugarán sus destinos y descubrirán, cara a cara, el horror de Jeffrey Dahmer.
Acertada dirección
«Lluvia constante» cuenta con una acertada dirección de Jesús Urqueta («Arpeggione», «El mar en la muralla»), que establece con claridad una narración que va de presente a pasado y viceversa, en solución de continuidad, logrando que estas dos dimensiones de tiempo convivan con claridad y sin confundir.
En este atractivo y dinámico dispositivo escénico hay un buen uso de la iluminación para delimitar variados espacios (la casa de Denny, una calle, la central de policía, el interior de la patrulla), y darle dramatismo mediante claroscuros que no son otra cosa que expansiones de lo que sucede en escena. Es una pieza que a nivel textual es hiper expositiva y se mueve siempre bajo las influencias narrativas heredadas por el teatro desde fuentes como el Cine Negro y el thriller.

A nivel de actuaciones, sobresale por su entrega y solidez el trabajo de Willy Semler como el intenso Denny, un ser violento que se mueve con soltura y pragmatismo en los bajos fondos, siempre en actitud de ataque y es un arquetipo de lo que denominamos ‘políticamente incorrecto’. Es el personaje que articula la progresión dramática de la obra y mueve la acción general, desafíos que Semler aborda con seguridad, fuerza y prestancia.
Un poco más atrás se sitúa el Joey de César Sepúlveda, sobre todo porque a nivel dramatúrgico su personaje es antes que nada el receptor de los estímulos de Denny, por lo que tiene pocas opciones de ser el generador de alguna acción y más que nada está situado en el plano de la reacción. Con todo, es encomiable la labor de Sepúlveda para entrar en buena forma al nivel de intensidad en el que se mueven los personajes durante las dos horas de duración.
Es valioso el hecho de que estamos aquí ante una dramaturgia infrecuente en nuestra cartelera local, en la que obras que no son de dramaturgas y dramaturgos chilenos brillan por su ausencia. Una pieza de estas características enriquece y amplía nuestro conocimiento sobre el teatro actual y sus tendencias estéticas.
«Lluvia constante» golpea por su descarnada temática, atractiva puesta en escena y logradas actuaciones. Es un estreno que refresca la cartelera y nos da a conocer a un dramaturgo más allá de sus éxitos en el campo del streaming.
«Lluvia constante», de Keith Huff. Dirección de Jesús Urqueta. Asistencia de dirección de Amalia Kassai. Traducción de Sofía Elizalde. Escenografía e Iluminación de Tamara Figueroa. Vestuario de Loreto Monsalve. Universo sonoro de Alvaro Pacheco.
Funciones hasta el 29 de enero de 2023 en Teatro Zoco (Av. La Dehesa 1500, Lo Barnechea), los viernes y sábado a las 20 horas, y domingo a las 19 horas.
Entradas a la venta en https://www.puntoticket.com/evento/lluvia-constante-teatro-zoco-ene-2023
Si te gusta este contenido, déjanos un comentario